En la actualidad, Al Gore cobra entre 69.000 y 117.000 euros por discurso, posee opciones sobre acciones de Google, valoradas en 20,8 millones de euros, y ha ganado hasta 5,5 millones de euros en anticipos de sus libros. Además, según publica este viernes el diario El Economista, aconseja a una empresa de capital riesgo norteamericana acerca de cómo invertir en un fondo de tecnología
ecológica valorado en 408 millones de euros.
Estas cantidades suponen una importante mejora desde que en el año 2000 perdiera las elecciones frente a George W. Bus. Según una documentación oficial citada por este rotativo, su patrimonio ascendía entonces a 1,38 millones de euros. Entonces, sus mayores activos dos casas en Nashville (capital de Tennessee) y Arlington (en el estado de Virginia), valoradas en 519.000 eoros, así como una inversión de 693.000 euros en acciones de empresas petroleras.
Gore comenzó por unirse a Google como asesor en 2001. En aquel tiempo se trataba de un motor de búsqueda de Internet relativamente nuevo, con una progresión ascendente. En marzo de 2003 se incorporó al consejo de administración de Apple, donde posee opciones sobre acciones valoradas en unos 4,16 millones de euros. Gore también ha invertido una parte significativa de su patrimonio en Current TV, un canal de televisión por cable en el que los usuarios pueden colgar sus propios vídeos. Cuenta con 38 millones de suscriptores en EEUU y, actualmente, llega a ocho millones de hogares en el Reino Unido.
El Federalista: No está mal hacer fortuna pero es poco ético hacerla vendiendo una falacia, ni modo, los astrólogos, ufólogos y demás bichos hacen fortunas vendiendo baratijas a la masa poco ilustrada, mal por esos consumidores y bien por los bolsillos de estos charlatanes.
El mundo recordará esta época como una de frenesí irreflexivo en pos de teorías que resultaron ser fraudes que originaron costosos protocolos, normativas y regulaciones gubernamentales y multilaterales. En el futuro, científicos e historiadores verán esta época como un episodio de oscurantismo de principios de siglo con la connivencia de ciertos científicos y divulgadores.
Al igual que en retrospectiva muchos científicos declaran mea culpa por colaborar al construir armas de destrucción masiva, en siglos posteriores otros científicos lo harán por las falacias que sostuvieron sus colegas, concientes ellos que en el fondo no eran sino estrategias para obtener financiamiento para sus centros de investigación y divulgación.
Al menos la teoría del calentamiento global antropogénico servirá en el futuro como caso de estudio sociológico de ciencia y corrupción, casi puedo imaginar los títulos de libros, papers y artículos al respecto.
No comments:
Post a Comment