Thursday, March 01, 2007

Administración de un sistema de pensiones libre de corrupción

La mejor manera de obtener una pensión digna y un seguro médico decente es a través de un sistema de ahorro personal que le permita año tras año aumentar los dineros propios en una cuenta que en un momento dado se pueda usar para costearse la vida luego de años de trabajo o que pueda sostener un largo y costoso tratamiento médico. Pero cada persona debe poder elegir su sistema de entre varias opciones sin ser forzado a ninguna, no es el caso de nuestro país donde existe un solo proveedor de seguros de pensiones y no puede elegirse otro en reemplazo. Esto es corrupción: obligar a la gente a usar un servicio pésimo y no darle libertad de elección.

El sistema estatal de pensiones vigente actualmente no funciona porque no existen opciones en competencia que le permitan a los usuarios elegir el sistema más adecuado, pero también no funciona porque al no existir competencia no existe preocupación de los funcionarios administradores por mejorar el servicio y reducir costos para brindar una mejor atención. Poco les importa a los funcionarios si los aportantes y pensionistas están bien o mal atendidos pues a la final están obligados a usar el servicio y no hay peligro de que un competidor haga mejor las cosas y se lleve a los clientes atendiéndolos mejor.

Al ser un monopolio del gobierno, el sistema de seguridad social está secuestrado por políticos que manejan el servicio con el mínimo posible de prestaciones pero con el máximo de ganancias para sí y para su grupo sin ningún incentivo para hacer bien las cosas (el gobierno solo ofrece incentivos para corromperse). Es por ello que el sistema de pensiones debe ser administrado bajo libre competencia y por empresas privadas, pues aunque los empresarios también buscan beneficios en sus negocios, en libre competencia solo pueden lograrlo si brindan un buen servicio a costos convenientes o caso contrario quebrarán por la indiferencia de los posibles clientes hacia malos servicios.

En un sistema de libre competencia los ciudadanos pueden unirse para crear sistemas de ahorro personal propios como organismos sin fines de lucro y hasta pueden aportar voluntariamente valores extra que sirvan para cubrir a personas de escasos recursos. Esto sí realmente sería un acto de solidaridad y sistemas así sin duda atraerían nuevos aportantes. La decisión de donde colocar del ahorro personal lo harían profesionales en cada organismo con experiencia para encontrar los mejores lugares y negocios para invertir ese dinero y de este modo se logre una mejor pensión y servicios para los aportantes. De esta forma no solo se logra un beneficio para los socios del sistema, se logra que el ahorro financie proyectos empresariales que generarán más plazas de trabajo.

Sobre el principio de solidaridad, este no se cumple en el actual sistema porque la solidaridad implica siempre un acto voluntario no una obligación mediante un monopolio, Además en el sistema de reparto actual mientras transcurre el tiempo son más los beneficiarios que los aportantes por lo que el sistema siempre quiebra y las deudas no las asumen los funcionarios, las asumen el resto de la sociedad mediante el pago de impuestos, incluso quienes no están asegurados terminan pagando los errores de los funcionarios, esto mismo es corrupción.
¿Un sistema de pensiones privado sería mas costoso? No, siempre y cuando el gobierno también elimine las trabas regulatorias y los impuestos financieros y de salida de capitales. En suma, que se permita competencia entre distintas empresas y organizaciones privadas.

2 comments:

Carlos Méndez said...

Muy buen post.El libre mercado en los sistemas de pensiones es lo mejor.

Saludos liberales,
Carlos

http://liberalcolombiano.blogspot.com

La Mente de un Hermetista said...

Eso es una realidad muy lamentable como se maneja el futuro de nuestros jubilados por parte del IESS ecuatoriano.

Aqui en Suecia han llegado a un punto donde los que aportan a las pensiones son pocos y los que cobran son el doble. Debido a eso han optado por dar autonomía a que los ahorradores para su jubilación pongan parte de sus dinero en fondos privados. De lo contrario no podrán hacer frente a las jubilaciones futuras.

Saludos