Toma tu "política petrolera soberana"

Noticia en Diario Hoy: Rafael Correa cuenta con menos petróleo

El Gobierno entrante de Rafael Correa recibirá un sector petrolero con la producción de crudo estatal más baja de los últimos años.Secuestrada por los paros de las provincias amazónicas y la falta de infraestructura (torres de perforación y de reacondicionamiento), la extracción de los campos de Petroproducción disminuyó este fin de semana a 168 mil barriles diarios y ayer subió a un total de 170 034 barriles, después de haberse estabilizado en un promedio de 178 mil barriles.La estatal atribuyó el hecho al paro de la provincia de Orellana para exigir a las petroleras privadas asfaltar 28 kilómetros de carretera, 16 de los cuales une a San Sebastián del Coca con Guayasa, y los restantes 16, entre Shushufindi y La Primavera.
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Mientras tanto, la producción del bloque 15, que pertenecía a la compañía estadounidense Occidental, cayó otra vez a 92 085 barriles diarios. El gerente de la Unidad de Administración temporal del bloque, Carlos Blum, dejó en claro que “la disminución productiva se debe a la declinación normal de la extracción que no ha sido compensada con nuevas perforaciones, las cuales se reiniciarían hasta principios de febrero”.

El Federalista: la mentada "política de soberanía petrolera" además de ser un concepto carente de sentido e inmoral en su ejecución, es también una puerta abierta para la corrupción rampante.

La política petrolera estatista basa su filosofía en que el sector privado es rehén de la mafia estatal de turno, de que los empresarios y trabajadores petroleros nacionales o extranjeros son meros tornillos en el engranaje rateril de la burocracia, que deben bailar al ritmo que le imponen los funcionarios públicos, que cualquier persona que ejerza profesión en este sector no es mas que un esclavo que debe someterse a regulaciones gubernamentales y gremiales.

En buena ley, una persona o grupo de personas que se dedique a extraer petróleo o minerales dentro de su propiedad o bajo contrato de arrendamiento está en su derecho legítimo de explotarlo y recibir los frutos de su trabajo con la sola limitación de que su actividad no afecte el derecho de terceros bajo la forma de contaminación o destrucción de propiedad.

Sin embargo este derecho legítimo no significa nada para las mafias estatales que regulan el sector, expropian y confiscan empresas, inventan "delitos" y tecnicismos legales para poner zancadillas a empresas y particulares y usufructuar ilegítimamente de los réditos de estos. Encima las empresas están obligadas a entregar regalías al Estado además de los impuestos vigentes, también están obligadas a construir carreteras o brindar servicios sociales (muchas lo hacen con agrado o como parte de sus contratos) y hasta están obligadas a pagar impuestos privados a gremios de profesionales como el 1x1000 a ciertos colegios de profesionales, una vergüenza.

Obviamente algunos empresarios viven de ciertos privilegios que logran mediante coima para sortear estas trabas, empresarios que si no existiesen estas mafias estatales reguladoras no podrían sino estar obligados a competir lealmente. Así entre estos y los otros, el petróleo ha significado una maldición que no ha creado riqueza sino que la ha destruido para pagar a los obesos funcionarios públicos de una miriada de instituciones inútiles.