Radio Morena: Nuevo ataque a la libertad de expresión

El gobierno de Rafael Correa utiliza un tecnicismo burocrático para sacar del aire a Radio Morena propiedad del diputado Luis Almeida.

Noticia en El Comercio: Almeida se quedó sin dos frecuencias suyas

La decisión del Consejo Nacional de Radio y Televisión (Conartel) de retirar dos frecuencias radiales al diputado Luis Almeida (PSP) produjo el rechazo de este político que se ha convertido en duro crítico del gobierno de Rafael Correa.
Almeida acusó al Régimen de “atentar” contra la libertad de prensa y perseguirlo políticamente. Almeida es propietario de Radio Morena.
“Rafael Correa cree que me va a amedrentar, pero no importa que Morena se quede sin señal, el problema es que pretende clausurar a todos los medios de comunicación. Esta es una actitud propia de Musolini y del fascismo, pues cree que solo él puede opinar”, dijo ayer Almeida durante una rueda de prensa en el Congreso Nacional.
El argumento del Conartel para realizar la clausura es de que la compañía Almorán S.A., gerenciada por la hermana del legislador, no firmó el contrato de concesión de los espacios en el plazo establecido por la Ley de Radiodifusión y Televisión; esto es, quince días después de la aprobación de la solicitud.
El artículo 18 de la Ley de Radiodifusión y Televisión indica que el acuerdo debía firmarse quince días después de la aprobación de la solicitud de las frecuencias, caso contrario, el Conartel anula el trámite.

El Federalista: de la misma forma como se confiscó Diario El Telégrafo con un vulgar tecnicismo, hoy el gobierno de Rafael Correa canceló la concesión de la frecuencia de Radio Morena, propiedad del diputado Luis Almeida de Sociedad Patriótica. Por no firmar el contrato en un plazo establecido se elimina el trámite, equivalente a la confiscación de Occidental por un supuesto traspaso de acciones (¡tremendo delito!). No nos engañemos, estamos ante un gobierno fascista que no dudará en usar toda la parafernalia burocrática para perseguir y encarcelar opositores y coartar toda libertad de los ciudadanos.