Para el vicepresidente de la Cámara Nacional de Distribuidores de Combustible, José Miranda, el desabastecimiento de gas y gasolina para estas fechas del año se ha vuelto un problema crónico. Pero no culpa al contrabando del cual se quejan los transportistas, sino a la “ineficacia del Estado en la producción de derivados del petróleo”.
Aunque empieza a normalizarce de a poco el expendio del producto en la ciudad después de que la Dirección Nacional de Hidrocarburos (DNH) entregó ayer el cupo emergente a las envasadoras y comercializadoras de gas licuado, Miranda afirma que sin una política estatal clara sobre combustibles y derivados del petróleo, la escasez de productos continuará.
Justamente sobre este tema hoy el Gobierno toma una decisión clave: el convenio de refinación de crudo ecuatoriano en Venezuela por la petrolera Pdvsa. Miranda critica dicho acuerdo al cual califica como “parche” de una situación que arrastra el país “hace 30 años de ser productor petrolero”.
En diálogo con Citynoticias (89,3 FM en Guayaquil), Miranda aseguró que “mientras no se time una decisión política en la práctica de la industria petrolera, los problemas con los derivados del crudo seguirán como siempre y lo demás son solo excusas”.
Para el representante gremial, el convenio que se apresta a firmar Petroecuador con su similar venezolana no es del todo beneficioso para el país. A su criterio, es preferible equipar una refinería en el país por 3.000 millones de dólares que gastar 2.000 millones de dólares para la importación de derivados. "Pero claro, los negociados de la intermediación son los que priman”, entiende. Por eso recomienda que Petroecuador negocie directamente con la refinerías internacionales para conseguir mejores precios, sin “la politiquería de los intermediarios”.
El Federalista: Es claro y conocido por todos que en el sector petrolero está secuestrado por bandas de mafias sindicales y políticas defendidas y asesoradas por "analistas" a sueldo, que propusieron la caducidad de Occidental, las reformas a hidrocarburos y ahora reclaman la salida de Perenco del país.
Estas mafias viven de nuestro bolsillo para financiar el propio, viven del monopolio estatal de petróleos para sus negociados, para contrabandear combustibles en las fronteras y negociar contratos a dedo. Y son estas mafias las responsables del actual y anteriores desabastecimientos de combustibles en el país.
Aquí van las soluciones: PRIVATIZACIÓN de Petroecuador, SOTE y Flopec, sus filiales e instalaciones, eliminar la Dirección Nacional de Hidrocarburos y el Ministerio de Energía y Petróleos. Reforma a la ley de hidrocarburos para permitir en forma clara -sin condicionamientos ni relativismos absurdos- la inversión privada en la exploración, explotación, transporte, refinación, venta y exportación de crudo y la venta de derivados. Que el Estado reciba ingresos petroleros únicamente en la forma de impuestos por IVA y por arrendamiento de las tierras de exploración y explotación.
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