Juan Carlos Solines Presidente del Conatel
La internet en Ecuador todavía está en una etapa de crecimiento inicial. Si bien es cierto que está retrasada frente al resto de Latinoamérica, tiene una perspectiva de crecimiento muy acelerada para los próximos dos años.
Los rápidos avances tecnológicos mundiales han planteado a los entes reguladores de muchos países una serie de retos. Esto porque la tecnología y las aplicaciones han sobrepasado a la capacidad de reacción de los Estados. De ahí que sea importante que Ecuador discuta sobre los temas tecnológicos y que los entes reguladores reciban opiniones de quienes están inmersos en el día a día de la tecnología.
Las discusiones públicas y los eventos multisectoriales buscan actualizar las regulaciones de Ecuador y ponerlas a tono con los nuevos tiempos. De ahí que esa participación del sector privado, la sociedad civil y la academia sea fundamental para que los esfuerzos reguladores tengan sentido y se conviertan en un estímulo para el surgimiento de nuevos servicios y para el ajuste de nuevos modelos de negocios que permitan adaptarnos a las nuevas tecnologías que vendrán rápidamente.
La internet en Ecuador todavía está en una etapa de crecimiento inicial. Si bien es cierto que está retrasada frente al resto de Latinoamérica, tiene una perspectiva de crecimiento muy acelerada para los próximos dos años.
Los rápidos avances tecnológicos mundiales han planteado a los entes reguladores de muchos países una serie de retos. Esto porque la tecnología y las aplicaciones han sobrepasado a la capacidad de reacción de los Estados. De ahí que sea importante que Ecuador discuta sobre los temas tecnológicos y que los entes reguladores reciban opiniones de quienes están inmersos en el día a día de la tecnología.
Las discusiones públicas y los eventos multisectoriales buscan actualizar las regulaciones de Ecuador y ponerlas a tono con los nuevos tiempos. De ahí que esa participación del sector privado, la sociedad civil y la academia sea fundamental para que los esfuerzos reguladores tengan sentido y se conviertan en un estímulo para el surgimiento de nuevos servicios y para el ajuste de nuevos modelos de negocios que permitan adaptarnos a las nuevas tecnologías que vendrán rápidamente.
El Federalista: La Internet se encuentra todavía en etapa de crecimiento inicial... y siempre se encontrará allí si se mantienen las ruinosas políticas públicas actuales en materia de telecomunicaciones. En general hay muy poco que celebrar hoy día, en Ecuador existe un oligopolio estatal de telefonía cuya ineficiencia se cubre con impuestos ciudadanos, existe un freno estatal a la libre competencia en telefonía celular impidiendo que las tarifas bajen de precio o existan nuevos servicios para beneficio del público. Una muestra precisa de la ineficiencia pública son las regulaciones en materia de acceso a Internet que lejos de permitir el acceso masivo a este poderoso medio solo han alejado a las familias de escasos recursos de los beneficios de la interacción digital con el mundo al regular el funcionamiento de Cybercafés.
El sector en general está intervenido por la Superintendencia de Telecomunicaciones, el Consejo Nacional de telecomunicaciones, la Secretaría Nacional de Telecomunicaciones y el Consejo Nacional de Radiodifusión y Televisión, cuatro entes burocráticos para regular las comunicaciones. ¿Qué beneficio tienen los ciudadanos de esta burocracia gigantesca? absolutamente ninguno, por el contrario es posible encontrar regulaciones absurdas como la de Cybercafés (Conatel) donde se fija tasas de US$300 por "derechos de registro" de un Cybercafé, US$100 por "costos administrativos", US$100 adicionales si el cybercafé tiene solo dos terminales (?) y decenas de trámites, copias de contratos, solicitudes a funcionarios, detalles técnicos, etc.
En suma, un gasto público desmedido distribuido en 4 entes que regulan al mismo sector, un burocratismo agobiante que encarece, obstaculiza y corrompe el desarrollo del sector, políticas anticompetitivas que impiden el uso de las tecnologías existentes para proveer servicios telefónicos que abaratarían los precios al usuario final, creados con el único propósito de arropar a las ineficientes empresas estatales de telefonía y telecomunicaciones.
Si el Presidente del Conatel quiere recibir una opinión mía, es esta: que el gobierno deje de obstaculizar y encarecer los servicios de telecomunicaciones. Que exista un solo ente regulador, la Superintendencia de Compañías, que se encargue solamente de registrar las empresas y certifique la propiedad de las frecuencias de radio, televisión y comunicaciones inhalámbricas. Lo demás, la tecnología y el uso que le dan a esta los ciudadanos, es competencia de los ciudadanos mientras no se violente la propiedad de terceros, no cabe mejor regulación que esta.
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