Empresarios guayaquileños se rebelan contra reforma tributaria

Noticia en El Comercio: Cámara de Comercio de Guayaquil desconocerá ley tributaria de Correa

Un sector de los empresarios de Ecuador desconocerá los nuevos impuestos que apruebe la Asamblea Constituyente hasta tanto sean sometidos a referendo, advirtió este lunes María Gloria Alarcón, presidenta de la Cámara de Comercio de Guayaquil
Alarcón fijó la posición del gremio ante la intención de la Asamblea de mayoría oficialista de aprobar la reforma tributaria del gobierno, cuestionada duramente por industriales y banqueros.
“Si no es una ley válida, no obliga. Esa es mi posición y la de muchos empresarios. Institucionalmente nos hemos reunido con el directorio ampliado (de la Cámara) y ese es el sentir ” , declaró la dirigente al canal Ecuavisa.
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El sábado el presidente socialista Rafael Correa advirtió que autorizará a los trabajadores para que tomen las empresas que paralicen sus actividades en protesta por los nuevos impuestos.
“Nos hacen paro empresarial, (y) autorizamos a los trabajadores, a los obreros a que operen esas empresas, no nos vamos a someter a las mafias de siempre ”, dijo Correa en su programa semanal de radio.

El Federalista: aquí se evidencian dos delitos que las mentes débiles o poco formadas ignoran, talvez porque quien comete los delitos es el máximo funcionario público y usa el poder del gobierno para ello.

El primer delito: robo, hurto, apropiación indebida de propiedad. Todo tributo es por definición un saqueo impuesto a los ciudadanos con el fin de sustentar al gobierno, si los servicios del gobierno son relativamente eficientes y el saqueo es mínimo, el robo no deja de serlo pero se siente menos y puede contabilizarse como un márgen de pérdidas aceptable. Lo que no es aceptable es que se cobren altísimos impuestos como los actuales, se obtengan no malos sino pésimos servicios gubernamentales y encima pretenden crear más tributos para financiar un estado obeso, ladrón e ineficiente.

El segundo delito: extorsión, coerción. Que el primer mandatario amenace con medidas de fuerza a un sector económico determinado que se resiste a su expoliación, es un acto criminal, amenaza del uso de la fuerza y un comportamiento propio de gente vil.

Detener la actividad económica de un negocio es legítimo por cuanto el propietario es quien fija las reglas dentro de su propiedad, sucede todos los días cuando los negocios cierran por su horario, por fin de temporada o por fin o cambio de actividad económica. Que un propietario decida detener su negocio en protesta por el abuso del gobierno es su derecho legítimo, que el gobierno cierre negocios o inste a que terceros tomen propiedad privada es un acto mafioso.

De acuerdo a lo anterior, resulta que es el Estado, con el actual presidente a la cabeza, la única organización criminal que expolia, extorsiona y amenaza a los ciudadanos. Es en realidad el Estado la mafia, y Rafael Correa el actual príncipe de los mafiosos.